Rebajar la euforia

El tiempo pone en su sitio a aquellos que se atreven a realizar juicios o predicciones sin demasiados argumentos y dejándose llevar por sensaciones o sentimientos. Han tenido que pasar 22 jornadas del campeonato de liga para que el mallorquinismo tenga que claudicar y darle la razón a Vicente Moreno. En el Sadar se volvió a demostrar que, con estos futbolistas, es imposible ganar si no se compite al cien por cien y no se cometen errores groseros. El técnico volvió a repetir este discurso en la sala de prensa tras la derrota y la pobre imagen ofrecida por los futbolistas ante Osasuna. La mejor y casi única arma a la que le saca un excelente rendimiento el equipo es a su solvencia como local que, con el incondicional apoyo de la grada, le da ese plus de motivación y seguridad para sacar adelante los partidos. En Palma es más difícil no salir enchifados concentrados y con confianza a la hora de afrontar los partidos.

Molango no está dispuesto a dar un paso en falso ante una afición que no perdonaría otro fracaso.

Mensaje conservador

Todo lo contrario a cuando se viaja. Es posible que se corra, pero es no es suficiente y es cuando aparecen las carencias de las que habla Moreno. Como visitante al futbolista parece que se le acaban las ideas. Muchos desaparecen y no se puede dejar todo en manos de Reina, Sevilla y Lago. Es muy arriesgado porque puede pasar lo de Pamplona, último ejemplo de cuando fallan los tres. Moreno, Recio y Molango, por este orden, saben muy bien las limitaciones de la plantilla que, por suerte y en especial por el trabajo de us entrenador, ha rendido muy por encima de sus posibilidades reales. Hoy transita con tranquilidad hacia la permanencia sin agobios ni arrogancias. Desde el club se lanza un mensaje conservador. Ellos saben que el fútbol y quizás estos dos últimos golpes recibidos lejos de Palma sirvan para ayudar a que el mallorquinismo acepte este discutso. Molango, desde que arrancó la liga, no ha variado su hoja de ruta ante los micrófonos en las contadas ocasiones en las que se somete a preguntas. Hay que tener calro de donde venimos, quienes somos y que presupuesto tenemos. El club debe consolidarse en la categoría, no podemos luchar contra grandes recién descendidos.

Celebración del primer tanto de Osasuna frente al Mallorca. Foto: LaLiga.
Celebración del primer tanto de Osasuna frente al Mallorca. Foto: LaLiga.

Limitaciones

El consejero delegado no quiere vender más ilusión de la necesaria. Nada de falsas expectativas. Primero porque no ha olvidado y es lo suficientemente inteligente para no volver a equivocarse con una puesta en escena populista. Consciente de las limitaciones de la plantilla para una liga tan larga y exigente, el CEO no está dispuesto a dar un solo paso en falso ante una afición que no le perdonaría otro fracaso. Hay que rebajar cualquier conato de euforia, algo que hasta la fecha resultaba complicado por la brillante primera vuelta para un recién ascendido con la misma plantilla del ascenso, pero el tiempo le está dando la razón. Hay que poner freno al entusiasmo y a las expectativas infundadas jugando para la permanencia y olvidándose de fantasear con el ascenso y dejar trabajar al club con vistas a confeccionar una plantilla con futbolistas top de Segunda. Entonces podrá atacarse el ascenso directo la próxima temporada. La duda que tengo es saber si la propiedad tiene esa misma visión ambiciosa para rascarse de nuevo el bolsillo.


Portada: Molango y Stojiljkovic posando tras la firma del contrato (RCDM).

Sobre Tomeu Terrasa

Comunicador dedicado durante más de 30 años a la información deportiva. Ha narrado al RCD Mallorca en Primera y Europa además de acompañar a Moyà y Nadal alrededor del mundo desde 1997.

Deja una respuesta

*

Acepto la politica de privacidad *