Nadal irá a por más

Han sido unas últimas horas intensas y con una gran saturación mediática después de que Rafel Nadal, con 35 años y 241 días, ganara su segundo Open de Australia. Fue ante Medvedev y, tras cinco horas y 24 minutos de final, fue uno de los partidos más largos de su carrera. El manacorí ya tiene 21 títulos de Grand Slam, uno más que Federer y Djokovic. Se han acabado los adjetivos a estas alturas de su carrera. Desde el momento que acabó el encuentro, más ahora que estamos en la era digital, no hizo falta esperar al los periódicos en papel para leer todo tipo de titulares como “Supremo”, “De otro planeta”, “El más grande”, “El mejor de la Historia”, “El marciano”, “Más grande que ninguno”, “Único” o “Eterno”.

Volverá salir a por todas, aunque lo hará de forma prudente y según la hoja de ruta que marque su equipo.

Ilusión renovada

Sus 13 Roland Garros, cuatro US Open, dos Wimbledon y otros tantos Abierto de Australia, otorgan al mallorquín unos números espectaculares. Es el mejor de todos los tiempos. A muchos les quedará la espina de saber que hubiese sucedido si el serbio hubiese podido participar finalmente. Pero estaremos a tiempo porque esto no ha hecho más que empezar y a Nadal se le nota muy metido. No hace falta nada más que escuchar sus palabras y ver el lenguaje corporal su celebración. A sus 35 años está con ilusión, ganas y volverá salir a por todas aunque lo hará de forma prudente, pensada y estructurada según la hoja de ruta que le marque su equipo encabezado por Carlos Moyà.

 

Cuerda para rato

Seguramente esta mentalidad es la que podrá permitirle sumar algún Grand Slam más a su ya de por sí laureado palmarés. La gran pregunta es si podrá ganar más títulos. Personalmente, creo que sí. ¿Cuántos? No lo sé. Pero seguro que puede ganar Roland Garros, sobre tierra batida y al mejor de cinco sets. Tal vez en Wimbledon tenga menos opciones pero, sobre cemento, ya ha demostrado en Australia de lo que es capaz y el US Open ya lo ha conquistado en cuatro ocasiones. El hecho de haber estado casi seis meses sin jugar ni entrenar le da un valor añadido al triunfo en Melbourne. Otra gran pregunta es si alguien será capaz de atraparle y superarle. Parece que Federer está ya fuera de juego. Djokovic puede intentarlo pero primero debe resolver sus problemas con la vacunación.

Sobre Tomeu Terrasa

Comunicador dedicado durante más de 30 años a la información deportiva. Ha narrado al RCD Mallorca en Primera y Europa además de acompañar a Moyà y Nadal alrededor del mundo desde 1997.

Deja una respuesta

*

Acepto la politica de privacidad *